Saturday, October 24, 2015

VIVA EL PODER DE LA CONCENTRACIÓN

Los seres humanos solemos vivir en un sueño continuo, sin concentrarnos en el momento presente que otorga dicha y felicidad a quien las visualiza y acepta. Esas que están en el momento presente y en las cuáles, deberíamos concentrarnos. Concentrándose en las cosas bellas del presente, usted podría llegar más lejos de lo que puede imaginar, viviendo lo que llamo, un presente futuro.

No se puede negar que diariamente nos rodean demasiadas tentaciones y distracciones y tenemos que decidir cuál es la mejor manera de invertir nuestro tiempo. Es ahí, donde la concentración se convierte en algo de alta prioridad. Y prestarle atención a las cosas importantes de la vida será un trabajo a realizar; pero cuidado, que la atención puede obedecer a estímulos externos que, con frecuencia es una atención involuntaria y nos desvía de las cosas bellas de la vida, hacia cosas no deseadas. Pero, ahí está, también, esa atención de carácter interno y consciente sujeta a nuestra propia elección y que nos permite responder y reaccionar a las experiencias que queremos atender y dedicarles nuestro tiempo. Algunas áreas sobre las que debemos trabajar con especial cuidado para trabajar con una atención voluntaria bien desarrollada, son:

 Estrategias para desarrollar la capacidad de una atención voluntaria gobernada por nuestra fuerza interna, que nos permita ser capaces de transformar el presente y construir una vida enfocada y plena que nos haga sentir siempre, felices.

 Cultivar las vivencias de atención consciente que es una facultad genial de la mente humana para enfocarse en las cosas que queremos, al tiempo que las percibe como una revelación de cosas agradables y placenteras. No se puede perder de vista que en los tiempos modernos todo conspira continuamente para distraernos, golpeando nuestra mente hasta ensordecernos con múltiples quejas y reclamos de las cosas “malas”. Pero no ceda, porque en la atención al presente y a las cosas bellas de la vida hay un misterio del que surgen cosas reveladoras de la felicidad que se encuentra en las cosas simples de la vida. Porque la calidad de vida y la felicidad, no dependen de las riquezas materiales o las cosas pasajeras como la inteligencia y la beldad y, mucho menos, de las cosas que nos ocurren. La calidad de vida y la felicidad están dadas por aquello que elegimos como motivo de nuestra felicidad y a lo cual decidimos estar atentos. Su atención juega, entonces, un papel determinante a la hora de definir su calidad de vida, crear y vivir esas experiencias que siempre ha deseado.